Juan IV (640-642)

72° Papa de la Iglesia católica
Juan IV
Papa de la Iglesia católica
24 de diciembre de 640-12 de octubre de 642
Murner History Cod Karlsruhe 3117 (crop).jpg
PredecesorSeverino
SucesorTeodoro I
Información personal
Nombre secularDesconocido
Nacimientoh. 580, Salone (Dalmacia)DalmaciaCroacia
Fallecimiento15 de octubre de 642jul.
RomaItalia
INICIO DEL PONTIFICADO  VIII, 24.XII.640
FIN DEL PONTIFICADO        12.X.642
NACIMIENTO                          Dalmata


72.- Juan IV (Dalmacia) (640-642)

Nació en Dalmacia. Elegido el 24.XII.640, murió el 12.X.642.

Intentó conducir por el camino de la verdad a los disidentes de Egipto.
Hizo trasladar a Laterano a los mártires Venancio, Anastasio y Mauro.
El mismo quiso consagrar 28 sacerdotes y 18 obispos para estar seguro de la profundidad de su Fe.

Arcediano de la Iglesia en el momento de su elección, su breve pontificado se inició rechazando la Ecthesis, un edicto promulgado en 638 por el emperador Heraclio en el que se realizaba una profesión de fe monotelista, doctrina que mantenía que en Jesucristo existen dos naturalezas pero una sola voluntad.

Asimismo, intentó romper la conexión existente entre esta doctrina, declarada herética, y el papa Honorio I, que la había aceptado durante su pontificado. Para ello envió una carta apologética al emperador bizantino Constantino III en la que mantenía que Honorio nunca afirmó que en Jesucristo hubiera dos naturalezas y una sola voluntad, sino que lo que defendió fue que en Él existían dos naturalezas pero negando que existieran dos voluntades contrarias.

Magisterio de Juan IV

Del sentido de las palabras de Honorio acerca de las dos voluntades
[De la Carta Dominus qui dixit, al emperador Constantino, de 641]
...Uno solo es sin pecado, el mediador de Dios y de los hombres el hombre Cristo Jesús [1 Tim. 2, 5], que fue concebido y nació libre entre los muertos [Ps. 87, 6]

Así en la economía de su santa encarnación, nunca tuvo dos voluntades contrarias, ni se opuso a la voluntad de su mente la voluntad de su carne... De ahí que, sabiendo que ni al nacer ni al vivir hubo en Él absolutamente ningún pecado, convenientemente decimos y con toda verdad confesamos una sola voluntad en la humanidad de su santa dispensación, y no predicamos dos contrarias, de la mente y de la carne, como se sabe que deliran algunos herejes, como si fuera puro hombre.

En este sentido, pues, se ve que el ya dicho predecesor nuestro Honorio escribió al antes nombrado Patriarca Sergio que le consultó, que no se dan en el Salvador, es decir, en sus miembros, dos voluntades contrarias, pues ningún vicio contrajo de la prevaricación del primer hombre

Y es que suele suceder que donde está la herida, allí se aplica el remedio de la medicina. Y, en efecto, también el bienaventurado Apóstol se ve que hizo esto muchas veces, adaptándose a la situación de sus oyentes; y así a veces, enseñando de la suprema naturaleza, se calla totalmente sobre la humana; otras, empero, disputando de la dispensación humana, no toca el misterio de su divinidad

Así, pues, el predicho predecesor mío decía del misterio de la encarnación de Cristo que no había en Él, como en nosotros pecadores, dos voluntades contrarias de la mente y de la carne. Algunos, acomodando esta doctrina a su propio sentido, han sospechado que Honorio enseñó que la divinidad y la humanidad de Aquél no tienen más que una sola voluntad, interpretación que es de todo punto contraria a la verdad..

Juan IV






Fuentes: conoze.com
wikipedia